compañeros de mi vida,
barra querida de aquellos tiempos.
Me toca a mí hoy
emprender la retirada,
debo alejarme
de mi buena muchachada.
Adiós, muchachos.
Ya me voy y me resigno...
Contra el destino nadie la talla...
Se terminaron para mí
todas las farras,
mi cuerpo enfermo
no resiste más...