jueves, 24 de enero de 2008

Proa al Sur (Calorro y Jacarandá)

Decidí (se decidió, decidimos, no sé) poner rumbo al sur y esta tarde me encontré manejando por la Ruta 5 bordeando el Pacífico cada vez más andino, casi pellizcando esas hermosas playas de arenas blancas (no tan vírgenes) interrumpidas por pronunciados peñascos que con su altanería le daban ímpetu a las insistentes olas. La bondad del camino, un asfalto impecable, señales oportunas y trazado de autopista con doble carril, solamente invitaban a dormir (cosa que no hice!) o a escuchar música y revolver un poco el guiso de ratones, sapos y culebras que se cuecen a fuego lento en mi cabeza; así hice sonar a los temas más dispares pero siempre con ese inevitable retorno freudiano fato in casa: Tu Calorro de Estopa y El Jacarandá de M. E. Walsh.
Tu Calorro la intepreta un grupete hispano, tiene unos cinco añitos, prestale atención a la letra, es muy sensual:
"Fui a la orilla del río y vi que estabas muy sola. Vi que te habías dormido, y que crecían amapolas. En lo alto de tu pecho, tu pecho hecho en la gloria, yo me fui "pa" ti derecho y así entraste en mi memoria.
Tú me vestiste los ojos, yo te quitaba la ropa. Todas las palomas que cojo vuelan a la pata coja. Tú ibas abriendo las alas, yo iba cerrando la boca. Tú eras flor desarropada y yo el calorro que te arropa.
Tu perfume es el veneno que contamina el aire,que tu pelo corta, que me corta hasta el habla y el entendimiento porque es la droga que vuelve mi cabeza loca. Después me quedo dormido en una cama más dura que una roca, soñando que aún no te has ido, soñando que aún me toca.
Y el sol se va sonrojando porque la noche le va cayendo. Los pájaros van llegando, los árboles tienen sueño. Sus hojas ya se han cansado de aguantar tanto el invierno. Y yo sigo aquí a tu lado y hasta que me lleve el viento.
De luto se pone el cielo que viene con nubes negras, será porque tiene celos de que esta noche te tenga. Qué oscuro que se está haciendo! Échale leña a la hoguera, la hoguera de sentimientos que arde si estoy a tu vera.
Tu perfume es el veneno..."




El Jacarandá es una canción que me remonta a mi más tiernita infancia, creo que es la primera letra de poesía que aprendí de memoria de la Revista Anteojito antes de que Armstrong pisoteara tierra selenita. Muchos recuerdos, muy dulce la letra.
"Al este y al oeste llueve y lloverá una flor y otra flor celeste del jacarandá.
La vieja está en la cueva pero ya saldrá para ver que bonito nieva del jacarandá.
Se ríen las ardillas, ja jajá jajá, porque el viento le hace cosquillas al jacarandá.
El cielo en la vereda dibujando está con espuma y papel de seda del jacarandá.
El viento como un brujo vino por acá. Con su cola barrió el dibujo del jacarandá.
Si pasa por la escuela, los chicos, quizá, se pondrán una escarapela del jacarandá."






2 comentarios:

  1. Tucumán, tiene una avenida de Jacarandaes amarillos, bellisima, son las flores mas hermossas que he visto en árboles.. y apartee s una cancion que me remonta ami infancia inevitablemnete. UN beso

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  2. Y yo anclado acá... a vos te parece?
    Un abrazo Mefistófeles, buen viaje.

    Macedonio

    P.D: hnjpblbk...tu blog me hace escribir en lenguas que no comprendo. Espero no haber insultado a nadie.

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estos que se creen con derecho a opinar ...


Non accontentarti di sopravvivere, devi pretendere di vivere in un mondo migliore, non soltanto sognarlo!